Nuestra liturgia, que nos une en unidad junto a nuestro Pastor Universal, hecha de menos la
presencia personal del Papa. Por tal motivo en cada Misa se hecha de ver. A partir de la sede vacante, aqui
en la diócesis de Roma se nos ha pedido tener en cuenta lo siguiente: "Se
recuerda que desde el 28 de febrero a partir de las ocho de la noche hasta la
proclamación del nuevo pontifice, las intercesiones de las Plegarias Eucarísticas van debidamente adaptadas a la situación de Sede Vacante, es decir, no se
recuerda al Papa, pero se menciona regularmente el Obispo diocesano.