Será el dia de mañana 8 de noviembre cuando, con la ayuda de Dios, presentaré y discutiré el trabajo escrito que satisfactoriamente he logrado. No ha habido experiencia ardua pero fructífera que me haya tocado preparar: penetrar y cultivar el amor a la Sagrada Escritura, y que suerte hacerlo por medio del que fué Obispo de Milán en el s. IV: San Ambrosio.
Aula Magna
Entrada hacia el Instituto
En el fondo se aprecian las instalaciones del Instituto Patristico, Roma